Sin embargo estos nuevos desarrollos sobrepasaron las tácticas y estrategias en el campo de batalla, ya que la tendencia en la guerra seguía siendo de tipo napoleónica en la cual dos masas de soldados respaldados por caballería y artillería se enfrentaban uno a uno en lineas alternando disparos, pero la nueva tecnología dejó en claro que las guerras deberían evolucionar a la misma velocidad que los equipos ya que la enorme cantidad de bajas hacía evidente que la precisión mortal aunada al nuevo desarrollo de municiones estacarían las operaciones en el campo de batalla como en efecto sucedió.

  la bala minié fue un desarrollo paralelo al tubo cañón de anima estriada, este nuevo tipo de munición cambiaba el paradigma ya que anteriormente las balas eran macizas bolas de plomo y esta evolucionó a una cilindro con punta afiliada que la hacía más aerodinámica de igual manera al ser propia para mosquetes de anima estriada si efectividad de duplico al impactar contra los huesos y generaba astillas de hueso que eran propensas a infecciones.

las técnicas médicas durante la guerra fueron algunas de las causantes de más muertes debido a las infecciones y a las terribles condiciones de las operaciones, la falta de antibióticos, anestesias y equipo adecuado generaron en algunos casos una mayor cantidad de muertes que muchas de las batallas, los cirujanos operaban ininterrupidamente sin alguna práctica sanitaria, siendo las amputaciones los procedimientos más comunes ya que la gangrena era el principal problema.

Durante todo el transcurso de la contienda los mecanismo de combate se fueron mejorando en cada batalla, ya que los proyectista comenzaron a trabajar en nuevas ideas y prototipos que las firmas pudieran patentar, con el fin de extender los contratos del ejército y acortar la guerra, sin embargo en la mayoría de los casos los resultados finales se veían de manera brutal en el campo de batalla.